Kaká se iba al Chelsea, pero la grave lesión de rodilla ha frustrado una operación que se llevaba con máximo sigilo entre el Chelsea y el Real Madrid.
El brasileño había dado luz verde si el club estaba de acuerdo, que lo estaba, porque Kaká no es plenamente del gusto de Mourinho, aunque le valora por su gran calidad y humanidad. Según desvela ‘El Confidencial’ Carlo Ancelotti, técnico del Chelsea, ya había convencido a su presidente para que fuera a por él este mismo verano. El técnico italiano conversó con el entorno de Kaká y estaban dispuestos a cambiar de aires siempre y cuando el Real Madrid estuviera conforme.
Para ello, Roman Abramovich pondría sobre la mesa una cifra que satisfaga a Florentino Pérez, pagó 67 millones por él. La negociación, que estaba en su fase inicial, se fue al traste cuando se anunció que el brasileño estaría al menos cuatro meses fuera de los terrenos de juego”.
Una información con la que se ha especulado en los últimos meses tanto en la prensa inglesa como en la española. A primeros de Julio, en ‘The Telegraph’, Ancelotti reconocía “mantener contactos regulares con Kaká”. “Me gustaría tenerle conmigo. Kaká haría bien en volver a estar a mis órdenes, aunque soy consciente de que sería una operación multimillonaria”.
Lo decía sabiendo el mal año que el brasileño había vivido en el Real Madrid tanto en el aspecto deportivo, en el que había fracaso, como en el personal, afectado por las consecuencias de su bajo rendimiento. De ahí que el técnico italiano no aparcara el asunto aunque en los últimos días había tirado balones fuera diciendo que no podía fichar por el Chelsea: “Era un jugador mío y ha hecho mucho por el Milán, pero ahora pertenece al Real Madrid y él decidirá sobre su futuro junto con su actual club”. Era un mensaje contradictorio para alejar las especulaciones sobre las conversaciones ya iniciadas.
Kaká, por su parte, había dado el visto bueno para irse a Inglaterra y Mourinho también después de haber sido consultado por el club. Sin embargo, el Madrid se lo va a tener que quedar si o sí después de la grave lesión sufrida en su rodilla izquierda.
Una lesión que ha provocado la indignación en el entorno madridista y en el propio club. La afición está que trina con el futbolista, al que todavía no ha visto rendir como se esperaba. En el club el primero que está muy enfadado es el propio Mourinho, que se sube por las paredes por la actitud del futbolista. Pero esa actitud también se traslada al cuerpo dirigente, que no entiende como el jugador ha jugado con el club y con su propia integridad física.
De hecho, la lesión puede ser más grave de lo que parece si el cartílago de esa rodilla no se recupera plenamente. Y en el Madrid saben mucho de eso porque tiene dos casos recientes que han sufrido en sus propias carnes: Ruud Van Nistelrooy y Mahamadou Diarrá. Ambos estuvieron seis meses recuperándose y al holandés acabó traspasándole porque el Madrid no puede esperar a un goleador, mientras que Diarrá sigue en el equipo aunque por poco tiempo, porque en su posición han llegado dos futbolistas: Lass y Xabi Alonso.
sábado, 7 de agosto de 2010
Kaká estaba vendido
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario