En un acto benéfico con la Cruz Roja de China celebrado en Pekín, el '10' no quiso valorar la decisión de la AFA, aunque en las últimas semanas había criticado con insistencia a Batista. Maradona evitó también responder a la prensa respecto a sus intenciones futuras y se limitó a señalar que ahora su lugar está al lado de sus hijas.
El ex seleccionador argentino, que acaba de cumplir 50 años, tampoco contestó a la posibilidad de dirigir a algún otro equipo, después de que las puertas de la Albiceleste parezcan cerradas para él.
Maradona aterrizó en Pekín para una gira de diez días por China, durante los cuales visitará cuatro provincias y jugará dos partidos amistosos con futbolistas locales.
Así, está previsto que, además de la capital, Maradona visite Shandong (este), Anhui (centro) y Cantón (sur) para dar conferencias y disputar dos encuentros de carácter benéfico, en las ciudades de Jinan, el día 5, y de Dongguan, el día 7.
La Cruz Roja de China le nombró hoy "embajador del cariño", un título honorífico con el que distingue el apoyo de personalidades a la lucha contra las enfermedades en el país asiático. "No va a ser la última vez que yo venga a China. Después de ver lo que vi estaremos más juntos que nunca dando el apoyo que da esta gente que trabaja para que haya menos enfermos en China. Yo seré un aliado de todos ellos", declaró Maradona.
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