domingo, 8 de agosto de 2010

El Espanyol jugará la final del Carranza

Los jugadores del Sevilla observan el desenlace de la tanda de penaltis.

El RCD Espanyol venció con justicia al Sevilla y se enfrentará al Atlético de Madrid en la final del Trofeo Carranza. El conjunto de Mauricio Pochettino jugó muy intenso en la primera parte y en la segunda se limitó a controlar la calidad de los jugadores sevillistas. Los de Antonio Álvarez, por su parte, no estuvieron cómodos y sólo crearon peligro con las internadas de Perotti por la izquierda.

En la primera parte, el Espanyol superó al Sevilla de forma clara. Los de Pochettino apretaron la salida del balón de su rival y en todo momento el conjunto de Antonio Álvarez tuvo que rifar la pelota. Tan solo Perotti por la izquierda dio muestras de peligro, pero cuando los sevillistas recuperaban el balón se encontraban lejos de la portería de Kameni, que no tuvo trabajo en los primeros cuarenta y cinco minutos.

Los disparos del Espanyol sobre la portería de Palop fueron numerosos. Callejón, en el 24, obligó al portero sevillista a hacer una gran parada, de tiro fuerte a la escuadra. El primer tanto fue obra de Javi López, tras aprovechar un error de Squillaci, que se entretuvo al sacar la pelota hasta que la perdió y el extremo aprovechó un pase de Chica a placer. Pronto empató el Sevilla, gracias a un penalti transformado por Kanouté y provocado por Perotti.

En la segunda parte ambos entrenadores movieron los banquillos. Las fuerzas se igualaron, ya que el Espanyol no siguió al mismo ritmo físico y el Sevilla pudo mover el balón con más comodidad. De todas formas, hubo pocas ocasiones. La más clara llegó en el minuto 65, con un disparo al lateral de la red del defensa Konko. El Espanyol se limitó a controlar y a esperar la tanda de penaltis. Precisamente de pena máxima pudo sentenciar el equipo de Antonio Álvarez en el 83'. Un manotazo de Kameni en la cara de Negredo pudo llevar la victoria sevillista, pero el meta camerunés adivinó el lanzamiento del delantero sevillista y a partir de ahí no hubo tiempo para más. La tanda de penaltis fue favorable para el Espanyol, que mañana jugará la final ante el Atlético de Madrid.

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